Zu Verschenken (para dar) es un proyecto en curso que explora el fenómeno de una economíia informal específica en las calles de Berlín que opera ligeramente fuera del margen de la ley y más allá del intercambio capitalista.

Aquello que los Berlineses ya no necesitan no lo tiran, sino que lo dejan en la calle. Aquello que uno encuentra por la calle puede llevarlo a casa. Es un extraño y silencioso pacto no escrito, todos lo conocen, la mayoría lo acepta y muchos toman parte en esta práctica social.

No se produce ninguna transacción de intercambio entre donante y receptor. Es una transferencia que funciona mediante dos acciones independientes: el objeto es colocado en la calle, a menudo acompañado de una nota que indica «zu verschenken» (para dar), aquél que pasando por delante lo reconoce como un hallazgo se lo lleva a casa.

El estatus de estos objetos es una especie de limbo: entre titularidades consecutivas, potencialmente útiles pero degradándose a la intemperie, expuestos para una apropiación incondicional pero ilegal.

Talmente como etiquetas con el precio, llevan pegadas pequeñas notas. Anuncian «Para dar», «Para llevarse», «Limpias y desinfectadas», «Querido vecino, queda claro que nadie se interesa por estas cosas, sería bueno que se hiciera cargo de ellas usted mismo. Gracias!». En contraste con las etiquetas de precios, éstas no son los nombres para el fenómeno abstracto del valor económico, sino que evalúan el valor de uso en un intercambio comunicativo entre donante y receptor.

La ciudad se convierte en un depósito - almacén de objetos gratuitos que aparecen, desaparecen y eventualmente reaparecen en una constelación en constante cambio. La colección imposible de estos elementos temporalmente disponibles constituye un inventario infinito y un nuevo mapa de la ciudad que solamente puede ser captado por fragmentos y nunca completado.